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lunes, 11 de agosto de 2014
el Estado Islámico
ROMA, 08 Ago. 14 / 03:58 pm (ACI).- El Prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales, Cardenal Leonardo Sandri, agradeció al Papa Francisco su cercanía con los miles de cristianos perseguidos en Irak, quienes están sufriendo “acciones contra Dios y contra todo sentido de humanidad” de parte de los extremistas musulmanes del Estado Islámico (ISIS).
lunes, 4 de agosto de 2014
GAZA
Por Eduardo Galeano
Para justificarse, el terrorismo de Estado fabrica terroristas: siembra odio y cosecha coartadas. Todo indica que esta carnicería de Gaza, que según sus autores quiere acabar con los terroristas, logrará multiplicarlos.
Desde 1948, los palestinos viven condenados a humillación perpetua. No pueden ni respirar sin permiso. Han perdido su patria, sus tierras, su agua, su libertad, su todo. Ni siquiera tienen derecho a elegir sus gobernantes. Cuando votan a quien no deben votar, son castigados. Gaza está siendo castigada. Se convirtió en una ratonera sin salida, desde que Hamas ganó limpiamente las elecciones en el año 2006. Algo parecido había ocurrido en 1932, cuando el Partido Comunista triunfó en las elecciones de El Salvador. Bañados en sangre, los salvadoreños expiaron su mala conducta y desde entonces vivieron sometidos a dictaduras militares. La democracia es un lujo que no todos merecen.
Son hijos de la impotencia los cohetes caseros que los militantes de Hamas, acorralados en Gaza, disparan con chambona puntería sobre las tierras que habían sido palestinas y que la ocupación israelí usurpó. Y la desesperación, a la orilla de la locura suicida, es la
madre de las bravatas que niegan el derecho a la existencia de Israel, gritos sin ninguna eficacia, mientras la muy eficaz guerra de exterminio está negando, desde hace años, el derecho a la existencia de Palestina. Ya poca Palestina queda. Paso a paso, Israel la está borrando del mapa.
Los colonos invaden, y tras ellos los soldados van corrigiendo la frontera. Las balas sacralizan el despojo, en legítima defensa. No hay guerra agresiva que no diga ser guerra defensiva. Hitler invadió Polonia para evitar que Polonia invadiera Alemania. Bush invadió Irak para evitar que Irak invadiera el mundo. En cada una de sus guerras defensivas, Israel se ha tragado otro pedazo de Palestina, y los almuerzos siguen. La devoración se justifica por los títulos de propiedad que la Biblia otorgó, por los dos mil años de persecución que el pueblo judío sufrió, y por el pánico que generan los palestinos al acecho.
Israel es el país que jamás cumple las recomendaciones ni las resoluciones de las Naciones Unidas, el que nunca acata las sentencias de los tribunales internacionales, el que se burla de las leyes internacionales, y es también el único país que ha legalizado la
tortura de prisioneros. ¿Quién le regaló el derecho de negar todos los derechos? ¿De dónde viene la impunidad con que Israel está ejecutando la matanza de Gaza? El gobierno español no hubiera podido bombardear impunemente al País Vasco para acabar con ETA, ni el gobierno británico hubiera podido arrasar Irlanda para liquidar a IRA. ¿Acaso la tragedia del Holocausto implica una póliza de eterna impunidad? ¿O esa luz verde proviene de la potencia mandamás que tiene en Israel al más incondicional de sus vasallos?
El ejército israelí, el más moderno y sofisticado del mundo, sabe a quién mata. No mata por error. Mata por horror. Las víctimas civiles se llaman daños colaterales, según el diccionario de otras guerras imperiales. En Gaza, de cada diez daños colaterales, tres son niños. Y suman miles los mutilados, víctimas de la tecnología del descuartizamiento humano, que la industria militar está ensayando exitosamente en esta operación de limpieza étnica.
Y como siempre, siempre lo mismo: en Gaza, cien a uno. Por cada cien palestinos muertos, un israelí.
Gente peligrosa, advierte el otro bombardeo, a cargo de los medios masivos de manipulación, que nos invitan a creer que una vida israelí vale tanto como cien vidas palestinas. Y esos medios también nos invitan a creer que son humanitarias las doscientas bombas atómicas de Israel, y que una potencia nuclear llamada Irán fue la que aniquiló Hiroshima y Nagasaki.
La llamada comunidad internacional, ¿existe?
¿Es algo más que un club de mercaderes, banqueros y guerreros? ¿Es algo más que el nombre artístico que los Estados Unidos se ponen cuando hacen teatro?
Ante la tragedia de Gaza, la hipocresía mundial se luce una vez más. Como siempre, la indiferencia, los discursos vacíos, las declaraciones huecas, las declamaciones altisonantes, las posturas ambiguas, rinden tributo a la sagrada impunidad.
Ante la tragedia de Gaza, los países árabes se lavan las manos. Como siempre. Y como siempre, los países europeos se frotan las manos.
La vieja Europa, tan capaz de belleza y de perversidad, derrama alguna que otra lágrima mientras secretamente celebra esta jugada maestra. Porque la cacería de judíos fue siempre una costumbre europea, pero desde hace medio siglo esa deuda histórica está siendo cobrada a los palestinos, que también son semitas y que nunca fueron, ni son, antisemitas. Ellos están pagando, en sangre contante y sonante, una cuenta ajena.
Los niños invisibles
¿Cómo pueden viajar miles de niños centroamericanos por todo un país sin ser detectados? Una de las respuestas es la corrupción que "hace invisibles" a estos menores para los responsables de la vigilancia migratoria del país, le dice a BBC Mundo el sacerdote Alejandro Solalinde, fundador del albergue Hermanos en el Camino de Ixtepec, Oaxaca.
Pero en todos los casos el común denominador es que los menores buscan siempre buscan pasar desapercibidos. "No viajaron juntos los 60.000 que están en Estados Unidos, van poco a poquito; uno por aquí, otro por acá", explica Solalinde.
"Los que van solos aprenden a sortear todo tipo de peligros, pero otras veces tal vez alguien los llevaba y los deja a la mera hora, o puede ser que sus padres los acompañaron y estando en la frontera los dejan ir solos. La verdad es que nadie tiene la respuesta exacta".
Muchos de estos niños tienen derecho a solicitar refugio, pero las autoridades no lo conceden. En 2013, por ejemplo, de los 9.893 menores que fueron detenidos por el INM, sólo a 50 se les concedió asilo, asegura el activista.
Así, para la mayoría de estos menores su única alternativa es viajar al norte; por eso buscan superar los obstáculos en su camino. El flujo no se detiene, recuerda el sacerdote Solalinde.
Pero en todos los casos el común denominador es que los menores buscan siempre buscan pasar desapercibidos. "No viajaron juntos los 60.000 que están en Estados Unidos, van poco a poquito; uno por aquí, otro por acá", explica Solalinde.
"Los que van solos aprenden a sortear todo tipo de peligros, pero otras veces tal vez alguien los llevaba y los deja a la mera hora, o puede ser que sus padres los acompañaron y estando en la frontera los dejan ir solos. La verdad es que nadie tiene la respuesta exacta".
Muchos de estos niños tienen derecho a solicitar refugio, pero las autoridades no lo conceden. En 2013, por ejemplo, de los 9.893 menores que fueron detenidos por el INM, sólo a 50 se les concedió asilo, asegura el activista.
Así, para la mayoría de estos menores su única alternativa es viajar al norte; por eso buscan superar los obstáculos en su camino. El flujo no se detiene, recuerda el sacerdote Solalinde.
"Son casi 60 mil niños que ya están en Estados Unidos, nadie los vio. Pero los que siguen pasando, ¿dónde están?".
viernes, 1 de agosto de 2014
Frustación
Rubén Mendoza Rodríguez comenta desde Veracruz que ‘‘ante la avalancha de reformas, apabullante, inmisericorde e irreflexiva, permanecemos absortos, impávidos, inamovibles, pasivos, estupefactos y demás sinónimos relacionados; sin duda nuestros legisladores, poseedores de un conocimiento rústico pero efectivo, saben, desde hace mucho, que el mexicano ha dejado de responder a la aplicación constante de estímulos aversivos y contrarios a su bienestar, y acepta lo que le impongan sin chistar.
En mi fuero interno, ante el asalto en despoblado que estamos sufriendo, siento un frenesí que busca salida; me molesto, me enervo, quiero manifestarlo, gritarlo, buscar consensos y luchar en contra; pero después de tanto brinco, surge de mí la sensación de que nada de lo que haga encontrará eco, que nadie me seguirá, que nunca pasaremos de las palabras. ¿Por qué?, ¿acaso forma parte ya de nuestra constitución genética?, ¿necesitaremos, como antaño, un caudillo que nos guíe?, ¿o será sólo cuestión de fuerza de voluntad y amor propio?’’
En mi fuero interno, ante el asalto en despoblado que estamos sufriendo, siento un frenesí que busca salida; me molesto, me enervo, quiero manifestarlo, gritarlo, buscar consensos y luchar en contra; pero después de tanto brinco, surge de mí la sensación de que nada de lo que haga encontrará eco, que nadie me seguirá, que nunca pasaremos de las palabras. ¿Por qué?, ¿acaso forma parte ya de nuestra constitución genética?, ¿necesitaremos, como antaño, un caudillo que nos guíe?, ¿o será sólo cuestión de fuerza de voluntad y amor propio?’’
CARTA DEL DOCTOR MADS GILBERT AL MUNDO
Y PARA ALGUIEN MAS ...
Queridos amigos,
Ayer por la noche fue extrema. La ‘”invasión por tierra” de Gaza ha dejado a decenas de mutilados, destrozados, sangrantes temblando, muriendo - todo tipo de palestinos heridos, de todas las edades, todos civiles, todos inocentes.
Los héroes en ambulancias y en todos los hospitales de Gaza están trabajando en turnos de 12 a 24 horas, pálidos de fatiga y cargados de trabajo inhumano (todos sin recibir pago en el hospital Shifa los últimos 4 meses), se encargan, tratando de entender algo en el caos incomprensible de cuerpos, órganos, seres humanos que caminan y que no, respirando o sin respirar, con hemorragias o no.
SERES HUMANOS
Hoy, una vez más tratados como animales por ‘”ejército más moral del mundo” (sic).
Mi respeto por los heridos es infinito, en su contenida determinación agónica de dolor, agonía y shock; mi admiración por el personal y los voluntarios es interminable, mi cercanía a la “sumud” [la resistencia] palestino me da fuerza, aunque de a ratos sólo quiero gritar, sostener a alguien apretado, llorar, sentir el olor de la piel y el cabello de tibios niños, cubiertos de sangre, protegernos en un abrazo sin fin – pero no podemos darnos ese lujo; tampoco ellos.
Caras de gris ceniza – ¡Oh, no! aún no otra carga de decenas de mutilados y ensangrentados, aún tenemos charcos de sangre en el suelo de la sala de emergencias, montones de vendas ensangrentadas que gotean por limpiar – oh – productos de limpieza, en cualquier lugar, sangre y residuos de tejidos capilares, ropa, cánulas – las sobras de la muerte – todo sacado … para estar listo de nuevo y repetir todo otra vez. Más de 100 casos llegaron al hospital de Shifa en las últimas 24 horas, suficientes para un gran hospital bien equipado con todo, pero aquí – casi nada: electricidad, agua, material desechable, medicamentos o tablas, instrumentos, monitores – todo oxidado y como si se tomasen de museos de antiguos hospitales. Pero no se quejan estos héroes. Ellos siguen así como guerreros, la cabeza hacia abajo, enorme determinación.
Y mientras escribo estas palabras, aquí solo, en una cama, mis lágrimas fluyen, lágrimas tibias e inútiles por el dolor y la tristeza, la ira y el miedo. Esto no está sucediendo!
Y entonces, justo ahora, la orquesta de la maquinaria de guerra israelí comienza su sinfonía macabra de nuevo, en este momento: salvas de artillería de los buques de la marina de guerra en la playa, los rugientes F16, drones (Zennanis, en árabe), y los apaches que crean estragos. Todo hecho y pagado por los Estados Unidos.
Obama – ¿tienes corazón?
Yo te invito – pasar una noche – una sola noche – con nosotros en el hospital Shifa. Vestido de limpiador, tal vez. Estoy 100% convencido de que cambiaría la historia. Nadie con un corazón y el poder nunca podría irse de una noche en el hospital de Shifa, sin estar determinado a poner fin a la masacre del pueblo palestino.
Pero los crueles y despiadados han hecho sus cálculos y planificado otro asalto “dahyia” [la doctrina desarrollada por el general israelí Gadi Eizenkot para infligir el mayor sufrimiento a la población civil como método de disuasión] en Gaza.
Los ríos de sangre seguirán fluyendo la noche que llega. Siento que han afinado sus instrumentos de muerte.
Por favor. Haz lo que puedas. Esto, ESTO no puede continuar.
Mads
En Gaza, Palestina Ocupada
El Dr. Mads Gilbert es un cirujano noruego que asiste a las víctimas del macabro genocidio en Gaza.
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